Veo que no ceja en su enfado, y de verdad que no entiendo el motivo. Al menos, el motivo de su cabreo conmigo.
Veamos:
"El que no sabe aceptar una crítica, se tiene que hacer mirar, lo mismo está en deriva autoritaria".
¿En deriva autoritaria? Pero si yo no soy nadie y ya le dije que paso de políticos y de partidos.
¿Y cuál es la crítica que no sé aceptar, por cierto?
"Si tanto le escuece que le digan que esta FIESTA es un sucedáneo de la que se celebraba hace muchos años, mire usted, lo siento, pero es así..."
¿A mí qué me va escocer nada? A mí me dan tres pepinos todas las fiestas. No dejaría ni una: la Virgen, la Feria, San Isidro, la Semana Santa... Todas prohibidas. Absolutamente todas.
O todas a la hoguera junto a los políticos.
Una nueva y definitiva fiesta.
"... ahora si quiere cambiar la historia y decir otra cosa..."
Pero si ya le decía que estaba de acuerdo, que esta fiesta de Santa Ana no es como la de antes. Ni quiero cambiar la historia (aunque ya me gustaría), ni decir otra cosa.
QUE LLEVA USTED RAZÓN, QUE ESTA FIESTA DE SANTA ANA NO ES COMO LA DE ANTES, que yo vivía en la calle de abajo y me acuerdo perfectamente.
Ni me rasco, ni me pica, caballero; y cuando quiera quedamos a tomar café o a bailar una milonga. Porque a la vista está que ambos tenemos mucho tiempo libre.
Yo lo único que quería saber es por qué un tema tan nimio le enfurecía a usted tanto, pero creo que no ha leído mi comentario anterior entero.
Por cierto, esta mañana estuve en el Arabí, con un calor insoportable.
29 de Julio de 2017 - 14:47:30