Durante estos días saltaba a la luz pública a través del diario “El Mundo” que la multinacional española Indra, de la que actualmente el Estado es el primer accionista con un 20% del capital a través de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepi), está siendo investigada dentro de la operación Púnica, donde han sido detenidas más de treinta personas, entre ellas el que fuera número dos de Esperanza Aguirre, Francisco Granados. “El Mundo” denuncia que la UCO de la Guardia Civil está investigando “si se han emitido facturas falsas que han hinchado artificialmente el contrato para generar dinero B”.

Y tras leer esto, en Izquierda Unida-Verdes recuerdan que Indra "fue la empresa a la que el Ayuntamiento adjudicó la Oficina Virtual que tantos quebraderos de cabeza ha dado al consistorio por su retraso, modificaciones en el presupuesto y nefasto funcionamiento. Nos despierta gran incertidumbre que este ayuntamiento haya firmado acuerdos con una empresa investigada por presunta corrupción política. Por eso, vemos necesario que el Tribunal de Cuentas realice una auditoría interna para estudiar el pliego de condiciones y el contrato firmado con Indra y evaluar si hay un equilibrio entre el precio pagado y el trabajo realizado por la multinacional.

Por estos motivos, Izquierda Unida anuncia que presentará al pleno del Ayuntamiento una moción para solicitar al Tribunal de Cuentas que audite este contrato para comprobar si el pueblo de Yecla ha pagado más de lo necesario a esta empresa que, según las facturas registradas en el consistorio, ha recibido 163.000 euros por una Oficina Virtual que hoy, siete años después, solo funciona al 80%, según apunta Izquierda Unida.